Chile como único país de América Latina que sufrirá una contracción económica el próximo año
Por que Chile es el único país de América Latina que sufrirá una contracción económica.
La guerra en Ucrania, la inflación galopante que recorre el mundo, junto a la fuerte subida de tasas de interés en Estados Unidos, el dólar más alto en 20 años y la desaceleración de la economía china, el panorama no luce bien. Eso incluye a América Latina, donde las proyecciones de crecimiento son bajas. Pese a que los países de la región enfrentarán un año difícil, hay solo una economía que no va a crecer: Chile. El país sudamericano tendría el peor desempeño de Latinoamérica, según el FMI: una contracción de 1% el próximo año.
El mayor productor de cobre del mundo fue uno de los primeros países latinoamericanos en comenzar a subir la tasa de interés para controlar la inflación. Tasas altas controlan la inflación, lo que es una buena noticia, pero hacen caer el crecimiento: el precio a pagar por aumentar el costo de los créditos. Actualmente es el tercer país con la tasa de interés más alta (11,25%).
Y cuando el costo de pedir dinero prestado sube a niveles tan altos, baja el consumo de las personas, las empresas tienen muchas más dificultades para financiarse y las deudas se vuelven casi impagables. Más allá de la subida de tasas, hay muchas otras razones, internas y externas, que confluyen para que Chile sea la única economía que va a decrecer.
No cabe duda que el escenario internacional le está jugando en contra, pero ¿por qué el frenazo de Chile sería más profundo que el de los otros países latinoamericanos?
Modesta expansión del gasto público.
Como China, el principal socio comercial del país, se está desacelerando, la sed de materias primas disminuye. Eso, sumado al frenazo de Estados Unidos y el resto del mundo, una economía abierta como la chilena, acusa el golpe. A diferencia de los países petroleros que se han beneficiado de la escalada en el precio del crudo y de las naciones que exportan gas, Chile no ha tenido esos ingresos extraordinarios para mejorar sus cuentas fiscales, dado que el precio del cobre ha sido más bien fluctuante.
Pero además, el gobierno del izquierdista Gabriel Boric, ha tomado la decisión de no financiar su agenda social con deuda y ha optado por controlar el presupuesto bajo la consigna de mantener la «responsabilidad fiscal», luego de que la anterior administración de Sebastián Piñera, desencadenara un auge del gasto de los consumidores con un extenso paquete de apoyo por la pandemia de covid-19.